Este mes entró en vigor una ley que ordena a las agencias estatales utilizar los términos latino, latina y latine en documentos y comunicados oficiales. El término latine se propuso como una opción de género neutral sobre latinx, del cual algunos hispanohablantes manifestaron que no se originó dentro de la comunidad LGBTQ+ de habla hispana.
Los educadores de escuelas públicas se reunieron esta semana para discutir cómo se podrían aplicar estos cambios en el sistema educativo.
Los panelistas, que eran principalmente superintendentes escolares de varios distritos, dijeron que es importante para ellos participar en conversaciones sobre la nueva terminología para representar mejor a sus comunidades estudiantiles.
Miembros de la Comisión de Mujeres, Niños, Adultos Mayores, Equidad y Oportunidades (La Comisión para Todos) [MB1] y líderes educativos celebraron el foro para explorar cómo la ley puede influir en la cultura de las escuelas públicas y estatales.
“Hemos tenido estas conversaciones con los estudiantes y sus respuestas han sido variadas”, dijo la superintendente de las Escuelas Públicas de Hartford, Leslie Torres-Rodríguez. “Algunos de nuestros estudiantes se sienten latinos o latinas de forma sistemática [MB2] y soy muy consciente de abordar las preferencias de nuestros estudiantes —nuestros estudiantes, nuestro personal— y las preferencias de nuestras familias”.
A medida que continuaba la discusión, algunos inmigrantes hispanos de primera generación expresaron que no estaban familiarizados con el término "latine" hasta que llegaron a los Estados Unidos. Un estudio realizado por Higher Ed Immigration Portal estima que hay 17,000 estudiantes que son inmigrantes de primera generación matriculados en la educación superior de Connecticut.
Alexandra Estrella, superintendente de las Escuelas Públicas de Norwalk, indicó que el 70% de los estudiantes en sus distritos se identifican como hispanos o negros.
“Muchas veces preferirían usar su país para presentarse como, soy mexicana, soy mexicano, soy colombiano”, dijo Estrella. “Me aseguro de no forzar una etiqueta en ellos. Les dejo espacio para autoidentificarse”.
Dado que la comunidad hispana y latina crece rápidamente en los Estados Unidos, también están trayendo consigo su singular idioma y cultura. Esto ha desatado debates y discusiones sobre el uso del lenguaje y su importancia en la educación.
El representante estatal Geraldo Reyes, demócrata por Waterbury, quien presentó el proyecto de ley para encontrar una alternativa a los “latinx”, [MB3] dijo que quiere que la gente reconozca y respete el papel que tiene el idioma español en la cultura hispana.
“Honestamente, la mayoría de la gente está muy, muy confundida con el término 'latinx'. Si hablas con nuestras abuelas, tías, ni siquiera saben lo que significa la palabra porque nunca existió en sus vidas. Es una palabra de nueva generación, pero siempre termino optando por la belleza del idioma español", que tiene siglos de antigüedad, es específico de género e inclusivo, dijo Reyes.
Los educadores dijeron que a través de la conversación pueden encontrar maneras de incorporar efectivamente la nueva terminología al sistema educativo y crear un ambiente de aprendizaje más inclusivo y diverso para todos los estudiantes, independientemente de su origen.