NEW HAVEN, Connecticut – Para varias lideresas que llevan décadas fuera de su tierra, entre la comunidad puertorriqueña en el estado con la sexta concentración más grande de boricuas en Estados Unidos persisten muchos de los retos que les han acompañado en su búsqueda por una mejor vida y perdura, también, el deseo de mantener un lazo estrecho con Puerto Rico.
“Hemos tenido muchos logros, porque siempre me gusta decir que nos unimos cuando nos toca unirnos, pero hemos tenido muchas barreras de acceso. Llevamos muchísimos años aquí y todavía seguimos peleando las mismas batallas”, expresó Lydia Vélez Herrera, fundadora de Lilly sin Barreras, que brinda asistencia a hispanos vulnerables en el estado.
Algunas de esas barreras se observan en el acceso a servicios de salud y de vivienda, así como en los obstáculos con el idioma que enfrentan muchos puertorriqueños que llegan a Connecticut u otro estado sin dominar el inglés.
“Hemos visto mucho la discriminación, falta de información, de que no necesitamos documentos de inmigración, mucha confusión en cuanto al acceso a la salud, a la vivienda. Y acceso también a tener nuestras fiestas como puertorriqueños, que a pesar de que tenemos nuestra ciudadanía, no quiere decir que nos queremos separar de nuestro Puerto Rico”, resaltó Vélez Herrera.
La boricua, quien lleva 35 años en el estado, fue una de las lideresas que estuvo presente, el sábado, en la quinta reunión de embajadores que realiza la iniciativa Junte Boricua de GFR Media, que busca celebrar la primera parada puertorriqueña en la isla, el 24 de mayo de 2024.
Esta reunión, celebrada mientras a pocas cuadras se llevaba a cabo el Festival Puertorriqueño de New Haven, tuvo la peculiaridad de que todas las embajadoras presentes eran mujeres.
“El Junte Boricua es una invitación a los puertorriqueños que viven aquí en los Estados Unidos a que nos visiten en el verano de 2024″, explicó Joana Santiago Vázquez, directora ejecutiva de la iniciativa, sobre el evento a celebrarse entre el 1 de mayo y el 31 de agosto de ese año. “Vamos a estar resaltando más de 100 eventos que estarán pasando en los 78 municipios, incluyendo la Parada Puertorriqueña de Puerto Rico”, agregó.
Brenda María Cartagena, coach de vida que lleva 24 años en el estado, describió como variada a la comunidad de puertorriqueños en Connecticut: “Tenemos puertorriqueños nacidos y criados aquí, pero con raíces bastante fijas en la isla. Tenemos políticos (…), tenemos maestros”.
Por su parte, Gladys Rivera, pasada presidenta del Desfile Puertorriqueño y líder comunitaria en Hartford, capital de Connecticut, dijo que, entre los desafíos “que tenemos que seguir peleando y urgiendo que el gobierno nos ayude”, están la equidad, la asistencia médica y el acceso de niños y niñas boricuas a educación bilingüe.
Resaltó, además, que el grupo de puertorriqueños en el estado “ha evolucionado en la manera de que hemos crecido muchísimo en los últimos años”, y mencionó la importancia de eventos como los festivales que se han celebrado desde junio en varias ciudades de Connecticut, el sexto estado de Estados Unidos con más boricuas, con una población estimada de 288,922 en 2021.
Los puertorriqueños representan, además, el 8% de la población total del estado, colocándolo en la primera posición en ese renglón, por encima de Florida, Nueva Jersey, Nueva York y Massachusetts.
Vélez Herrera también destacó la solidaridad y compasión de muchos boricuas, que exhiben estas cualidades en cualquier parte donde estén, como ocurrió con el huracán María en 2017.
“(Ser puertorriqueño) es parte de quien eres. Es la vibra, es tu piel, entiendes por qué tu piel es de la forma que es, entiendes por qué tu mamá habla como habla, también entiendes qué son tus abuelos de dónde vienen los consejos… pero conoces también cuán poderoso tú eres como puertorriqueño que vives fuera del país y de nunca olvidarnos de esa tierra tan linda a donde podemos regresar”, esbozó.
Fueron seis las lideresas que respondieron al llamado del Junte Boricua y se comprometieron a buscar más voces que propulsen la visita de puertorriqueños en la diáspora a su tierra el año próximo. Con ellas, se inició en Connecticut el reclutamiento de embajadores, liderado por la boricua Sonia Alvelo, CEO de Latin Financial.
Para Santiago Vázquez, “muchas de ellas quieren ayudar a Puerto Rico de alguna forma. Así que todas dijeron que sí (a ser embajadoras). Nos van a seguir conectando con otros puertorriqueños de acá de Connecticut y eso es lo importante”.