© 2024 Connecticut Public

FCC Public Inspection Files:
WEDH · WEDN · WEDW · WEDY
WECS · WEDW-FM · WNPR · WPKT · WRLI-FM · WVOF
Public Files Contact · ATSC 3.0 FAQ
Play Live Radio
Next Up:
0:00
0:00
0:00 0:00
Available On Air Stations

Desafíos en los servicios médicos de emergencia de Wethersfield resaltan la complejidad que enfrentan los pequeños pueblos de CT en cuanto a la respuesta de las ambulancias

Ryan Thibodeau, estudiante de premedicina en UConn y empleado de WEMSA, junto con Edward Maxwell, ajustan las correas de una nueva camilla de emergencia en la estación de Wethersfield, Connecticut, el 20 de marzo de 2024.
Joe Amon
/
Connecticut Public
Ryan Thibodeau, estudiante de premedicina en UConn y empleado de WEMSA, junto con Edward Maxwell, ajustan las correas de una nueva camilla de emergencia en la estación de Wethersfield, Connecticut, el 20 de marzo de 2024.

Read in English

Los médicos de la Asociación de Servicios Médicos de Emergencia de Wethersfield (WEMSA, por sus siglas en inglés) se encuentran en una antigua casa de Nueva Inglaterra y repasan sus planes para el día.

Los técnicos de emergencias médicas y paramédicos conversan mientras el perro de la estación ladra y la sirena de la ambulancia resuena en el fondo.

Ryan Thibodeau, un estudiante de premedicina en UConn que trabaja para WEMSA, prepara la ambulancia para el día en curso mientras recuerda sus primeros días en respuesta a emergencias médicas.

“Cuando recién empecé, Wethersfield me acogió y me dio una oportunidad, y de alguna manera u otra me enamoré de esto", comparte Thibodeau.

En todo Connecticut, proveedores de servicios médicos de emergencia como WEMSA están en constante acción. Cuando entra una llamada al 911, una ambulancia responde. Sin embargo, lo que queda menos claro es quién determina qué proveedor de servicios médicos de emergencia acude a la escena.

Mientras que los pueblos tienen un gran control sobre si se despachan policías o bomberos, en el mundo de los servicios médicos de emergencia, la respuesta no se define con la misma exactitud. Esto se debe a que los últimos son provistos por una red de empresas, tanto grandes como pequeñas (además de organizaciones voluntarias), con licencia para responder a una gama de llamadas de emergencia.

Además, los pueblos no tienen la autoridad final sobre la respuesta de los servicios médicos de emergencia. En realidad, esto recae en el estado.

Según el Departamento de Salud Pública, la ley pretende garantizar "la calidad y seguridad de los servicios médicos de emergencia" en Connecticut.

Pero en Wethersfield, la ley recientemente generó complicaciones cuando WEMSA anunció que estaba cambiando su forma de operar.

“Estaba sumamente preocupado”

La respuesta en el mundo de los servicios médicos de emergencia es provista por una red de empresas, tanto grandes como pequeñas (además de organizaciones voluntarias), con licencia para responder a una gama de llamadas de emergencia.
Joe Amon
/
Connecticut Public
La respuesta en el mundo de los servicios médicos de emergencia es provista por una red de empresas, tanto grandes como pequeñas (además de organizaciones voluntarias), con licencia para responder a una gama de llamadas de emergencia.

Thibodeau señala que la mayoría de las llamadas de emergencia que recibe WEMSA no son de vida o muerte; a menudo son situaciones en las que alguien se ha caído y necesita ayuda para levantarse.

Pero cuando se trata de situaciones de vida o muerte y hay un aumento en el volumen de llamadas, Dennis McMahon, el jefe de WEMSA y un voluntario de ambulancia durante décadas, asegura que su pequeña empresa está más que preparada.

"Esto lo hemos manejado desde 1956", afirma.

El año pasado, WEMSA anunció que abandonaría el modelo de voluntariado. Como parte de este cambio, la asociación prescindiría de los servicios de Aetna como su contratista y lo reemplazaría con la Asociación de Ambulancias de East Windsor.

Sin embargo, esta decisión generó preocupación entre algunos líderes de Wethersfield.

"Podrían pasar fácilmente 20 minutos o más antes de que tengamos algún tipo de respuesta", expresó Frederick Presley, el administrador municipal de Wethersfield. "Si se tratara de un infarto o un derrame cerebral, estaría muy preocupado por lo que pudiera suceder".

En enero, Presley presentó una demanda ante el estado para bloquear la transición, instando al Departamento de Salud Pública a obligar a WEMSA a mantener a Aetna como contratista.

Los funcionarios estatales están considerando la solicitud, lo que podría tomar meses.

“No voy a firmar mi propia sentencia de muerte”

La respuesta en el mundo de los servicios médicos de emergencia es provista por una red de empresas, tanto grandes como pequeñas (además de organizaciones voluntarias), con licencia para responder a una gama de llamadas de emergencia.
Joe Amon
/
Connecticut Public
La respuesta en el mundo de los servicios médicos de emergencia es provista por una red de empresas, tanto grandes como pequeñas (además de organizaciones voluntarias), con licencia para responder a una gama de llamadas de emergencia.

Es común que los pueblos de Connecticut cuenten con pequeñas empresas de servicios médicos de emergencia, por lo que se tienden a asociar con otros proveedores para compartir recursos y ofrecer una atención más avanzada.

Durante años, WEMSA operó como un servicio voluntario, asociado con Aetna Ambulance Service de Hartford Healthcare.

Aetna contaba con el personal, equipo y capacidad para brindar soporte vital avanzado, intervenciones que estabilizan a un paciente en estado crítico mientras que se preparan para su transporte a un hospital.

No obstante, cuando WEMSA cambió a un modelo con fines de lucro el año pasado, Presley dice que propuso prescindir de los servicios de Aetna y reemplazarlos con los provistos por la Asociación de Ambulancias de East Windsor.

"Sin decirme lo que iban a hacer, [ellos] presentaron la documentación ante el estado para decir: 'Esto es lo que estamos haciendo ahora'", explica.

Presley dice que la decisión le sorprendió.

Pero McMahon de WEMSA indica que del cambio depende la supervivencia del servicio de ambulancia con décadas de antigüedad.

"Cuento con 40 años de experiencia, muchos de mis compañeros tienen entre 25 a 30 años de experiencia, contamos con muy buenos técnicos de emergencias médicas aquí. Estos chicos son increíblemente inteligentes", dice McMahon.

También comenta que está abierto a trabajar con Aetna, pero le preocupa que al final intenten impedir las operaciones de su pequeña organización.

"No voy a firmar mi propia sentencia de muerte", dice McMahon. "Simplemente no lo voy a hacer".

En 2022, los datos estatales muestran que hubo alrededor de 4,400 respuestas de servicios médicos de emergencia en Wethersfield. WEMSA atendió menos de la mitad de esas llamadas, todas ellas destinadas a brindar soporte vital básico. Aetna respondió a más de 3,600 llamadas en el pueblo.

Si WEMSA quebrara, McMahon advierte que Aetna eventualmente aumentaría los precios, "lo cual no sería justo para los residentes, los pacientes ni los contribuyentes del pueblo. Llevo toda mi carrera aquí, tratando de no perjudicar el bolsillo de los ciudadanos".

Aetna refuta esa afirmación, indicando que el 80% de las respuestas totales en Wethersfield son para pacientes cubiertos por Medicare o Medicaid, y que las tarifas son las mismas tanto para WEMSA como para Aetna.

“Un sistema desorganizado”

Anthony Rivera an EMT and Field Training Officer, who is pursuing a career in nursing, works inside the old New England house that is the WEMSA station.
Joe Amon
/
Connecticut Public
Anthony Rivera, técnico de emergencias médicas y oficial de capacitación en el campo, quien persigue una carrera en enfermería, trabaja dentro de la antigua casa de Nueva Inglaterra que sirve como estación de WEMSA.

Los problemas con los servicios médicos de emergencia en Wethersfield no son únicos.

Tom Varanelli, cuya empresa, Northeast Fire-Rescue, emplea a técnicos de emergencias médicas y paramédicos en todo Connecticut, dice que el volumen de llamadas ha aumentado tanto que los técnicos de emergencias médicas necesitan estar en la estación las 24 horas del día, los 7 días de la semana.

También afirma que las grandes empresas de ambulancias en todo el estado están sacando a las más pequeñas, ejerciendo un dominio del mercado que dificulta que las empresas pequeñas de servicios médicos de emergencia puedan competir.

"Algunas de las entidades hospitalarias más grandes, como Hartford HealthCare, se están convirtiendo en competidores más grandes en el estado", indica. "Esto también está sucediendo en Southington".

En Southington, los líderes de los pueblos están instando a que el Departamento de Salud Pública  apruebe un plan alternativo de servicios médicos de emergencia. Denuncian la lentitud del servicio de ambulancias, que es propiedad de una empresa de inversión internacional.

Mientras tanto, otros funcionarios municipales de Connecticut también están impulsando cambios bajo el argumento de que más grande no siempre significa mejor.

En East Haddam, la representante estatal Irene Haines afirma que el servicio voluntario de ambulancias con licencia estatal de este pueblo también está experimentando dificultades.

"Si el servicio voluntario no puede proveer el servicio, se recurre a la ayuda mutua", explica. "Y en un pueblo como el mío, de 57 millas cuadradas, el tiempo de respuesta es insuficiente. Esa persona que llama al 911 porque está sufriendo un paro cardíaco podría no recibir ayuda a tiempo y correr el riesgo de morir".

Al igual que en Wethersfield, Haines expresa su frustración por la falta de control local sobre los proveedores de servicios médicos de emergencia.

El administrador municipal de Wethersfield, Frederick Presley, también comparte su sorpresa al llegar a Connecticut y descubrir la falta de control local sobre los proveedores de servicios médicos de emergencia.

"Fui administrador del condado de Stafford, Virginia. Los servicios médicos de emergencia eran una función municipal, al igual que los servicios provistos por los bomberos y la policía. En Rhode Island, fui administrador municipal en West Warwick. Y, de nuevo, los servicios médicos de emergencia se ofrecían bajo un departamento como cualquier otro que era administrado por la ciudad", afirma.

"Estoy seguro de que hace 60 años [el modelo de WEMSA] funcionaba bien. La población no era tan numerosa, no existían tantos problemas y los autos no iban tan rápido. El mundo de ahora es muy diferente".

Mientras Presley apela la propuesta de WEMSA al estado, Aetna por el momento permanece como contratista.

Sin embargo, el futuro de la respuesta de los servicios médicos de emergencia en su pueblo continúa en el limbo. Todas las partes, desde los funcionarios del pueblo hasta Aetna y los trabajadores de WEMSA que han respondido a emergencias durante décadas, se encuentran esperando por una respuesta del estado, lo que podría llevar meses.

"Este es un sistema tan desorganizado”, dice Presley.

Por tal razón, cree que los pueblos necesitan una mayor participación sobre quién provee los servicios médicos de emergencia a nivel local y cómo lo hacen.

"No es solo Wethersfield", dice. "Necesitamos una nueva ley que otorgue control a las autoridades locales sobre cómo abordar estos problemas de seguridad pública, similar al control que tenemos para la policía y los bomberos".

Sujata Srinivasan is Connecticut Public Radio’s senior health reporter. Prior to that, she was a senior producer for Where We Live, a newsroom editor, and from 2010-2014, a business reporter for the station.

Stand up for civility

This news story is funded in large part by Connecticut Public’s Members — listeners, viewers, and readers like you who value fact-based journalism and trustworthy information.

We hope their support inspires you to donate so that we can continue telling stories that inform, educate, and inspire you and your neighbors. As a community-supported public media service, Connecticut Public has relied on donor support for more than 50 years.

Your donation today will allow us to continue this work on your behalf. Give today at any amount and join the 50,000 members who are building a better—and more civil—Connecticut to live, work, and play.

Related Content