Marcus Brown recuerda su niñez en Bridgeport y, aunque muchos de sus compañeros enfrentaron problemas con sus identidades, no tenían que preocuparse por su seguridad al hacerlo. Explicó que su vida hubiese sido mucho menos estresante de haber contado con un lugar dedicado a adolescentes LGBTQ+.
“Se me hubiera hecho más fácil salir del clóset”, relató Brown, quien ahora funge como representante estatal.
Dice que ahora, las cosas serán más fáciles, luego de la apertura del primer centro del orgullo en la ciudad dedicado a la juventud LGBTQ+ de la zona. El Bridgeport Pride Center abrió sus puertas el 20 de junio, pocos días tras el izamiento anual de la bandera del orgullo en la ciudad y un año después de anunciarse por primera vez.
Un lugar para reunirse
En otros tiempos, la ciudad gozaba de una vibrante escena cultural LGBTQ+ centrada en bares, según cuenta John Brannelly, activista local LGBTQ+. Pero todo eso ha cambiado. Muchos ahora se van de Bridgeport en busca de terceros espacios donde pueden sentirse seguros, pero Brown explicó que eso deja fuera a los adolescentes LGBTQ+.
Otros centros del orgullo en áreas circundantes, como New Haven y Norwalk, también están lejos y fuera del alcance de quienes no tienen un automóvil. Es por eso que activistas y filántropos como Elliot Leonard, cofundador de la Fundación Leonard-Litz, ubicada en la ciudad vecina de Fairfield, ayudaron con una subvención de $100,000 dólares al centro.
“En junio del año pasado emitimos un comunicado, en Febrero firmamos contrato de arrendamiento, y el jueves tendremos nuestra gran apertura. Es un día de mucho orgullo para Bridgeport”, manifestó Leonard.
El centro está ubicado en 166 Elm St., en el centro de la ciudad.
Llena un vacío
Brown y otros activistas explicaron que el nuevo centro llenará un vacío importante, ya que muchas personas LGBTQ+ en la ciudad continúan enfrentándose a la homofobia y la transfobia, además de los retos para conseguir atención médica compasiva.
Grupos comunitarios del área han manifestado que la población local necesita ayuda para acceder a recursos, cuidado de salud mental, orientación o simplemente tener un espacio que puedan llamar suyo, particularmente una vez comience el receso escolar de verano, Brown explicó.
“Jóvenes de la comunidad han expresado que necesitan un lugar para encontrarse con otras personas afines, y eso es justo lo que esperamos poder ofrecer a corto plazo”, dijo Brown.
Los servicios del centro incluirán facilidades y recursos de emergencia.
También contará con un salón de computadoras, una biblioteca y una sala de juegos para los más jóvenes. Además, se encuentra cerca de varias opciones de transporte, incluso rutas de autobús urbano y la línea de tren Metro North New Haven.
Si bien el Bridgeport Pride Center ha recibido un gran apoyo por parte de residentes y funcionarios electos, Brown señaló que, en las últimas semanas, el centro ha sido blanco de comentarios de odio en las redes sociales. Estos comentarios confieren aún mayor importancia a que la comunidad tenga un espacio seguro para reunirse en persona, puntualizó el representante.
Al reflexionar sobre su juventud, relató que tuvo que encontrar su propia identidad en gran medida por su cuenta, sin el apoyo de miembros de la comunidad LGBTQ+ local, pero la juventud de Bridgeport ya no tendrá que hacerlo.
“Ojalá hubiera tenido algo así”, reflexionó Brown. “Me hubiera encantado vivir más de mi vida de la forma más auténtica posible”.