Hallazgos recientes de la Escuela de Medicina de Yale revelan que las personas que residen en zonas con altos niveles de contaminación en el aire enfrentan un mayor riesgo de desarrollar dermatitis atópica, una enfermedad inflamatoria de la piel.
Los vecindarios cercanos a fuentes de contaminación en el aire, como fábricas, presentan niveles significativamente más altos de materia particulada. Estas sustancias, conocidas por provocar el asma, también puede agravar la dermatitis atópica en las personas.
Así lo afirma el Dr. Jeffrey M. Cohen, profesor asistente de Dermatología en la Escuela de Medicina de Yale y coautor del estudio publicado en la revista PLOS One.
La materia particulada, compuesta por diminutas partículas suspendidas en el aire, algunas de las cuales son tan pequeñas que solo pueden ser vistas con un microscopio electrónico, proviene de diversas fuentes, según el Departamento de Energía y Protección Ambiental de Connecticut.
Las principales fuentes de materia particulada incluyen automóviles, camiones, autobuses, fábricas y sitios de construcción.
"En términos de salud pública, estamos aprendiendo mucho sobre los efectos de la contaminación en el aire y lo que el cambio ambiental, en general, significa para la salud humana", afirmó Cohen. “Hay medidas que deberíamos tomar a nivel de política pública, basadas en nuestra comprensión de cómo el cambio ambiental afecta a las poblaciones vulnerables de manera más significativa que a otras".
Los investigadores analizaron los récords médicos electrónicos de más de 280,000 personas en todo el país, incluyendo en su mayoría a minorías raciales y étnicas, personas mayores y minorías sexuales y de género. Los hallazgos revelaron que, al igual que con las tasas de asma, tanto la ubicación como los ingresos están correlacionados con las tasas de dermatitis atópica.
A nivel individual, Cohen recomendó que las personas con dermatitis atópica consideren monitorear diariamente la calidad del aire.
"Las personas podrían decir, 'Sí, hay mucha contaminación en el aire'", comentó. "’Sé que cuando eso ocurre, me sale un brote de dermatitis. Quizás hoy me ponga una camiseta de manga larga en lugar de otra prenda’".
Sin embargo, reconoce que la dermatitis atópica es más difícil de manejar para las personas que viven cerca de fuentes de contaminación.