Un grupo de defensores de los estudiantes de Connecticut se reunió el martes para oponerse a las acciones de la administración de Trump, que, según ellos, afectarán negativamente a los estudiantes LGBTQ+, a los estudiantes inmigrantes y al presupuesto escolar.
“Estamos comprometidos con la protección de nuestras escuelas y de nuestros estudiantes”, dijo Leslie Blatteau, presidenta de la Federación de Maestros de New Haven y presidenta del comité directivo del grupo de defensa Connecticut For All, que organizó la conferencia de prensa del martes junto con la Federación Estadounidense de Maestros de Connecticut.
“No toleraremos estos ataques sin precedentes a las escuelas públicas, que son la base de nuestra democracia”, afirmó Blatteau. “Y no toleraremos estos ataques contra nuestros estudiantes, quienes mantendrán nuestra democracia en el futuro”.
Los oradores en el evento realizado en la Biblioteca Pública de Meriden señalaron varias acciones o propuestas de la administración Trump como motivo de preocupación. Una de ellas es la promesa de campaña de Donald Trump de cerrar el Departamento de Educación Federal.
“Sabemos que sin los recursos que provienen del Departamento de Educación, los estudiantes en comunidades de todo Connecticut experimentarían un impacto devastador en sus escuelas”, señaló Blatteau. “Necesitamos los recursos del gobierno federal para poder seguir brindando los servicios que ofrecemos”.
Protección para estudiantes vulnerables
Blatteau expresó su indignación ante la orden ejecutiva del presidente Trump que permite a agentes federales, incluidos los del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE. UU. (ICE, por sus siglas en inglés), ingresar a escuelas, hospitales y lugares de culto. “Esto genera estrés, caos y confusión innecesarios en las escuelas, y no solo para los niños inmigrantes, sino para todos nuestros estudiantes”, dijo.
Tabitha Sookdeo, directora ejecutiva de Connecticut Students For A Dream, destacó la necesidad de que los estudiantes indocumentados y los beneficiarios de la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), conocidos como “Dreamers”, se sientan seguros en la escuela. Ella fue una adolescente indocumentada y recordó que la escuela era un espacio seguro para ella.
“Hoy, debemos asegurarnos de que cada estudiante se sienta seguro, que se sienta apoyado y que pueda tener éxito en su entorno de aprendizaje”, afirmó Sookdeo. “El salón de clases debe ser un espacio de aprendizaje y crecimiento, no un lugar de miedo e incertidumbre. Garantizar protecciones y recursos para estos estudiantes les permite concentrarse en su educación, como cualquier otro niño, y contribuir a sus comunidades”.
Tony Ferraiolo, de Healthcare Advocates International y Equality Connecticut, criticó las recientes órdenes antitrans de la Casa Blanca que, según él, “les quitan a les jóvenes trans y no binaries su derecho fundamental a ser vistes y aceptades tal como son”.
“No podemos esperar que un estudiante dé el 100% en sus estudios si no puede ser el 100% de quien es”, explicó Ferraiolo. “Les estamos preparando para el fracaso. Cuando les negamos a los niños la posibilidad de ser reconocidos, lo que les estamos diciendo es que no pertenecen. Les estamos condenando al silencio y a la vergüenza”.
Constanza Segovia, directora de organización de Connecticut For All y cofundadora de Hartford Deportation Defense, instó a los legisladores a unirse a los activistas en la lucha contra las políticas de la administración Trump.
“Todos estamos aquí con la determinación de no normalizar las políticas violentas del actual presidente de EE. UU.”, dijo Segovia. “Estamos aquí con una exigencia clara a nuestros líderes en Washington D.C. y Hartford: Únanse a este rechazo”.
“La supervivencia de nuestra democracia y el futuro de nuestros niños dependen de nuestra capacidad para mantenernos unidos y de la capacidad de nuestros líderes para actuar con claridad y proteger a nuestras comunidades en su totalidad, lo que incluye proteger nuestras escuelas públicas de los buitres”, añadió.
Abordando la preocupación por la financiación a nivel estatal
Segovia también enfatizó la necesidad de acción a nivel estatal.
“Las políticas fiscales que tenemos a nivel estatal no están aportando a nuestras comunidades”, afirmó. “Financien nuestras escuelas, financien nuestros servicios y escuchen a las personas trabajadoras del estado, que están verdaderamente cansadas de estar cansadas”. “Nuestros líderes deben exigir que el dinero que llega al estado se utilice para invertir en nuestras comunidades y dejar de hacer pagos adicionales sobre deudas viejas cuando nuestros niños necesitan apoyo hoy”, agregó Segovia.
Blatteau, presidenta de la Federación de Maestros de New Haven, subrayó que las inversiones fuera del sector educativo también son importantes para mejorar el desempeño de los estudiantes en Connecticut.
“Las condiciones de vida de nuestros estudiantes son sus condiciones de aprendizaje”, dijo Blatteau. “Sin más recursos para vivienda, sin más recursos para atención médica, nuestros estudiantes seguirán enfrentando dificultades”.
“Necesitamos modificar las restricciones fiscales”, concluyó Blatteau. “Llamen al gobernador, háganle saber. Su presupuesto se anunciará mañana. Díganle que sin duda debemos cambiar las restricciones para que se puedan satisfacer las necesidades de nuestra comunidad”.