Traducción de María Aguirre
Normalmente, enero es un mes lento en Eddy’s Hair Salon en Maple Street en Manchester. El dueño Eddy Ozoria abrió la barbería en los años noventa, pero dijo que el negocio ha estado peculiarmente más lento este enero – solo un cuarto de sus clientes regulares fueron a atenderse.
El descenso en clientes en la barbería de Eddy sucede en otros negocios con dueños Latinos en el centro de Manchester. Dicen que sus ventas han estado bajas desde que el presidente Donald Trump tomó el poder e inmediatamente empezó a intensificar la aplicación de leyes migratorias en todo el país, generando miedo e incertidumbre para muchas personas.
“En verdad yo también lo estoy sufriendo”, dijo Ozoria. “Porque imagínese, ¿cómo nosotros vamos a pagar [las cuentas] y la renta que es cara? Nadie nos va a decir 'aguántese'”.
Ozoria ha notado que los clientes que sí van, tienen cabello más largo ya que esperan para su corte. Solo hablan de inmigración, dice, mientras los presentadores de noticias hablan de la aplicación de la ley migratoria en la televisión de la barbería.
“De las pocas personas que vienen, hay personas que nos cuentan que nadie quiere venir a recortar [el cabello] porque tienen miedo a salir a la calle”, dijo. “La familia a veces tiene miedo de llevar los hijos a la escuela … Y también a comprar a la tienda”.
A unas pocas cuadras, pagar las cuentas también le preocupa a Ana Román, la dueña de Ana Food Market. El negocio también está lento para ella. Ella prepara comida Hispana, como empanadas y arroz con frijoles. Lo que no se vende, se bota – y últimamente, ella ha estado botando mucha de su comida.
Aunque Román sí está de acuerdo con deportar a personas que tienen récords criminales, ella dice que arrestar a personas que trabajan y contribuyen a la economía, está mal.
“Estoy de acuerdo que los delincuentes se caigan”, dijo Román. “Pero los trabajadores, los que estamos trabajando honestamente, la gente que quiere salir adelante y son los que nos ayudan a nosotros, los están agarrando. Entonces la gente tiene miedo, no quiere salir”.
NBC reportó a fines de enero que alrededor de la mitad de personas arrestadas por ICE no tienen un récord criminal. Aunque Trump ha dicho que priorizaría deportar a personas con récords criminales, su secretaria de prensa dijo recientemente que la administración considera a cualquiera en el país sin estatus legal como un “criminal”.
Pero vivir en Estados Unidos sin autorización es considerada una violación civil, no una criminal.
Como cocinera y madre de familia, Román está especialmente preocupada por los niños que pasan hambre porque sus padres están con miedo de ir a comprar comida. Ella dice que las personas están con tanto miedo, que cualquier cosa vinculada a la aplicación de la ley los obliga a quedarse en casa.
Hace dos semanas, Román dijo que varios patrulleros de la policía de Manchester se parquearon al frente de su negocio durante unas horas para responder a una llamada no relacionada con la inmigración. A las personas les dio miedo entrar, aunque los patrulleros no tenían nada que ver con su tienda.
“Ese día no vino nadie”, dijo.
También dijo que escuchó informes sobre una redada de ICE en una gasolinera a unas cuadras de distancia.
NHPR trató de confirmar ese informe. El resultado fue un video borroso en Facebook que grababa lo que podría haber sido una acción de ICE, o simplemente unas personas paradas en un parqueadero con hielo.
El chisme o rumores sobre las redadas de ICE en el barrio siguen multiplicándose. Una persona dijo que ICE estaba cerca de la secundaria Central High School. Alguien más dijo que estaban cerca de la escuela Beech Elementary. Otra persona dijo que iban a detener a una docena de personas en un bar.
Es difícil verificar la precisión de estos informes o si son más frecuentes de lo habitual. ICE no ha respondido a varias solicitudes de confirmación de NHPR.
Manejar el chisme ha llegado a ser un segundo trabajo para John Cardona. Es dueño de El Parcero, un supermercado cercano de comida hispana. Él ha recibido muchas llamadas de clientes nerviosos que se pasan en Facebook, donde las personas han estado compartiendo lo que creen que es una redada de ICE.
“Nosotros hemos tratado de tranquilizar a la gente”, dijo. “[Les decimos] que no solamente se dejen llevar por los comentarios, por todo lo que otras personas dicen, por lo que publican en Facebook”.
Le dice a sus clientes que las cosas han marchado con normalidad a su alrededor – los mismos patrulleros en la misma ruta.
“Sino que pues vengan, que no está pasando nada, pero aún así la gente se siente muy nerviosa”, dijo.
Para los que sí van, él trata de hacerlos pasar y salir lo más rápido posible, incluso obteniendo detalles por teléfono con anticipación para aquellos que quieran enviar dinero a su país.
Mientras los clientes salen de El Parcero, tienen que navegar cuidadosamente sobre las aceras heladas flanqueadas por bancos de nieve sucia y congelada. Si alzan la mirada, el jardín de la casa del frente les presenta un letrero de dos metros.
Este dice “Trump 2024. Make America Great Again.”