Los fanáticos locales del béisbol catalogaron la nueva exhibición que abrió este mes en el Museo Mattatuck en Waterbury como una que no te puedes perder. La exposición “Roberto Clemente: Life and Legacy” resalta al astro afroboricua.
Clemente jugó 18 temporadas con los Piratas de Pittsburgh en las Grandes Ligas desde el 1955 hasta el 1972. A lo largo de su vida, también realizó trabajo humanitario en varios países latinoamericanos y caribeños.
La exhibición incluye artefactos históricos, obras de arte, fotografías y memorabilia de Clemente. Se trata de una colección personal del representante estatal Geraldo Reyes, nacido en Waterbury y gran fanático de Clemente.
Según el Censo de los Estados Unidos, alrededor de un 40% de los residentes de Waterbury se identifican como hispanos o latinos.
Reyes explicó que la exhibición busca unir a la comunidad hispana resaltando la labor humanitaria de Clemente.
“Mi meta es atraer a la juventud hispanohablante que conoce de Roberto Clemente o que quizá no ha escuchado de él. Todos conocen su faceta de jugador de béisbol, pero no todos saben de su lado humanitario y cívico”, expresó Reyes. “Cuando marchó con el Dr. Martin Luther King Jr., que estaba involucrado en asuntos cívicos, que abogaba por la justicia social, que no le gustaba que hubiera tanto racismo en este país”.
Clemente abrió el camino para nuevos jugadores hispanos. En 1973, Clemente se convirtió en el primer latino de origen puertorriqueño en entrar al Salón de la Fama Nacional.
En 1972, Clemente falleció en un accidente de avión de camino a Nicaragua, mientras llevaba suministros a las víctimas de un terremoto, con apenas 38 años de edad.
Jeremiah Vargas, quien estuvo entre los 80 invitados que acudieron a la inauguración de la exhibición en junio, es de ascendencia puertorriqueña. También es el cofundador de Tater, una compañía familiar de Waterbury dedicada a la fabricación de bates de béisbol. Vargas mencionó que está orgulloso del legado de Clemente, su labor por la justicia social y su pasión por el deporte.
“Roberto Clemente es una gran figura del béisbol. Verás el número 21 en cualquier parte de la isla”, dijo Vargas, refiriéndose a Puerto Rico. “Somos muchos los apasionados por el béisbol, en especial los jugadores que representan el deporte en sí”.
La exhibición es representativa del estado, ya que Connecticut tiene una larga tradición de apoyar equipos de ligas menores de béisbol desde los 1800. Waterbury, Hartford y New Britain fueron de las primeras ciudades en adoptar el béisbol de ligas menores y ligas profesionales en el estado.
Luis Irizarry, de ascendencia puertorriqueña, también es de Waterbury y es fanático del béisbol. Explicó que está orgulloso de ver a puertorriqueños unirse para homenajear a Clemente mientras presentan su legado deportivo y humanitario a las nuevas generaciones.
“Al sol de hoy, sigue siendo un ídolo para muchos niños”, dijo Irizarry. “Y yo procuro enseñarle a mi nieto sobre el trabajo humanitario de Roberto Clemente, lo más importante de su legado”.